Partirse la cara por el barrio

Estos días se celebran las fiestas del barrio de María Auxiliadora y como es tradición en los últimos años el jolgorio se ve acompañado de actos de carácter informativo y reivindicativo. Una sabia mezcla porque las fiestas, como momento de encuentro de los vecinos y vecinas del barrio, tienen que servir para hacer piña y tenemos que acostumbrarnos a que esto lo sea tanto alrededor de un porrón de cerveza o un trozo de tortilla como en los actos de reflexión y denuncia de los problemas que condicionan nuestro día a día. Por eso elegir el lema de «fuera la subestación eléctrica» como lema de ese Garrampapop que se consolida es una buena idea o invitar a vecinos de Zaragoza de Parque Goya, que también tienen su propia subestación para pelear, al acto de confraternización de barrios una forma compartir y solidarizarse más allá de los límites de nuestra ciudad. Si además este acto se saca a la calle, traspasando las paredes del local de la asociación, no se puede por menos que admirar esa claridad de ideas que pasa por ir dejando despachos y situar en la calle el escenario de la acción ciudadana. Así que, antes que nada, felicitar a la asociación impulsora de esta forma de trabajar y, sobre todo, a Carmen García Serrano la presidenta que a pesar de tener que estar con la boca cerrada por un desgraciado accidente ocurrido el pasado sábado sigue trasmitiendo el impulso vital que necesitan estas causas ciudadanas que, si algo tienen, es pocos padrinos y sí muchos desvelos. Espero que pronto veamos asomar en esa boca ahora forzosamente cerrada nuevos dientes para su sonrisa de siempre. Como más o menos le dijo la vicepresidenta en sus emocianadas palabras no hace falta que se parta la cara por el barrio hasta ese punto.

Un Plan de Mejora Urbana para los Cosos

¿Puede una ciudad permitirse el lujo de tener su calle principal y escaparate de la ciudad sumida en el abandono?. ¡Pues sí!. Lo hace Huesca. Bueno lo hacen quienes gobiernan (el último va para 10 años) en el Ayuntamiento, que es quien a la definitiva tiene la capacidad legal, los medios materiales y los recursos económicos suficientes para evitarlo. Muchas veces tengo la sensación de que, a fuerza de convivir con ello y haber habituado nuestros ojos a tan lamentable imagen, no damos la importancia que tiene, para la satisfacción propia y buena imagen respecto a quienes nos visitan, actuar de forma decidida para corregir esta realidad. Al igual que en nuestras casas es importante que nos reciba un ambiente acogedor cuando traspasamos el umbral de la puerta, es importante que en nuestra ciudad seamos acogidos con ese mismo ambiente cuando usamos sus plazas y calles para convivir con nuestro convecinos o pasear con quienes nos vienen a ver.

Y como no será porque algunos no llevemos años dando guerra para que esta situación cambie  me voy a permitir hacer un poco de historia.

A propuesta de cha se aprobó en Pleno del 30 de mayo de 1996 la elaboración de un Plan de Mejora Urbana de los Cosos.  Será porque, a diferencia de ahora, entonces se creían que los acuerdos plenarios deben llevarse a la práctica o por la inestabilidad existente en el gobierno municipal, el caso es que dicho acuerdo se llevó a la práctica y que los arquitectos Corvera-Hernanz redactaron un «Plan de Mejora Urbana en los Cosos de Huesca». Un documento muy exahustivo que incluía una relación de fichas de todos los edificios, un análisis del alumbrado público existente y una propuesta de ordenanza que establecía las normas para que las actuaciones sobre las fachadas dieran a las transformaciones a realizar armonía y coherencia.

Fernando Elboj. Yo sigo….?

Tras casi de diez años de convivencia, o cohabitación, municipal creo que poco puede sorprenderme Fernando Elboj respecto de su forma de ejercer la alcaldía en el Ayuntamiento de Huesca.   No obstante tengo que reconocer que me ha resultado inesperado su  último golpe de timón remodelando en profundidad las áreas de gobierno del PSOE. Se ha señalado como razón última el reciente nombramiento de la diputada Marta Gastón como presidenta de la Comisión de Economía en el Congreso pero, tengo para mí que la reorganización rondaba por la cabeza del alcalde hace algunos días o meses, aunque sus propios compañeros de partido se enteraran de sus intenciones la víspera a la hora de cenar. Esta forma de ejercer el poder, personal y midiendo los tiempos para adecuarlos a la hoja de ruta de su trayectoria política, es una de las improntas que el mandato de Fernando Elboj nos está dejando.

Todo apunta a que la remodelación esconde razones de más profundo calado y que deben analizarse las huellas que tras ella van quedando. Vayamos con los nombres propios que han sonado.

FERNANDO ELBOJ: Se autorrefuerza al asumir las competencias de Medioambiente que las suma a las de Urbanismo que ya llevaba directamente. Con reiteración he criticado su triple condición de alcalde, responsable de urbanismo y senador porque es imposible abordar bien un número tan grande de tareas  importantes.  Si en urbanismo ya sufríamos una importante falta de gestión, especialmente en cuestiones del día a día, es fácil suponer que ocurrirá ahora. Además me parece especialmente grave unir en una mano medioambiente y urbanismo ya que aquel siempre debe tener cierta capacidad de vigilancia sobre éste.

Obreros y obreras

Vivimos tiempos de desideologización y despistes mayúsculos. Enredados en una modernidad mal entendida hemos ido perdiendo el oremus sobre las cosas que de verdad importan y nos hemos embarcado en una especie de feria de las vanidades donde lo único que cuenta es ver como consigo MI casa más lujosa, MI coche más deslumbrante, MI círculo social de más predicamento, MI , MI, MI, MI,…….. Y digo HEMOS porque de la misma forma que los grandes avances sociales han tenido espíritu colectivo, los grandes desastres se confeccionan con el mismo patrón. Y claro, en este nuevo patronaje se ha perdido el valor de las cosas esenciales, por ejemplo el que tiene lo que históricamente se ha llamado la fuerza del trabajo. Es decir el obrero/a. Poco a poco el discurso plano y deideologizado ha ido calando y parece que hasta el mismo nombre se haya convertido en un anacronismo. Será otra consecuencia del «atado y bien atado» que Franco nos legó y que ya había sustituido el término por el de productor dado que el primero sonaba muy a rojo. Yo no tengo la menor duda y, entendiendo que la actividad intelectual forma parte de la fuerza de trabajo en su carácter más esencial, tengo a orgullo seguir considerándome OBRERO. Una de las palabras más dignas de nuestro vocabulario. Y eso lo reivindico y grito en alto en un día tan señalado como hoy: 1º de Mayo.